lunes, 19 de enero de 2009

¿Gustos compartidos?


Muchas veces se escucha a cualquiera de los miembros de una pareja quejarse de que su "media naranja" no comparte sus gustos. Otras veces, a menudo en quienes comparten el ámbito laboral, se menciona que el hecho de "estar en lo mismo" genera un desgaste extra y hasta se producen competencias. Son puntos opuestos, pero....¿Se puede alcanzar un equilibrio?. ¿Es mejor el yin y el yang o el intentar "tirar codo a codo"?

Si vamos por el lado de las parejas con gustos o intereses diferentes encontramos que las más jóvenes son las más quejosas por estas disparidades y por el hecho de que no se acompañan o se menosprecian las actividades, hobbies o acciones de uno o de ambos miembros. Esas "broncas" a veces explotan, y son fuente de rupturas, y otras se trabajan en el seno conyugal. Se sabe de muchas parejas que acuerdan respetar los gustos individuales sin tratar de presionar a la otra parte para que se sume a ellos y así logran cierta armonía. Otras, tal vez más evolucionadas o mejor comunicadas, no solo acuerdan lo anterior sino que al ver feliz a la persona que aman se interesan por saber como la pasaron, preguntan, piden que les cuenten pero sin invadir porque en definitiva el interés no pasa por la actividad en sí, sino por la felicidad del otro. Esto les permite pasar a otro nivel que es el de compartir acciones en común luego de haber satisfecho sus gustos personales.

El otro polo está en los que por compartir tanto se terminan sofocando. Lo vemos en las empresas que permiten parejas o en quienes comparten un negocio o en muchos otros ejemplos. Llega un momento en el que no hay casi nada para conversar porque todo se ha vivido al unísono. Son las mismas actividades, las mismas amistades, la misma vida social y se tiene poco espacio para el individualismo bien entendido. Se ahogan. Se les hace imprescindible buscar espacios propios y muchas veces esto es entendido por la otra parte como "ya no te intereso".

Evidentemente debe haber un equilibrio y me imagino que ese equilibrio es inestable, es decir, se debe ir moviendo el fiel de la balanza a medida que la pareja madura. Tarea nada fácil.

Cada matrimonio o pareja debe tener su receta....nos la cuentan??

2 comentarios:

  1. Obviamente, el ideal es tirar codo a codo, el tema es el contexto donde se vive una relación.
    Considero que jamás las broncas vienen solas, es decir, no siempre son por los gustos no compartidos, siempre hay algo más que no se quiere ver o no se puede charlar.
    En cuanto a los que se respetan y comparten gustos, te diría que se trata de ceder de vez en cuando y no de resignar siempre. Hay límites
    Y en cuanto a compartir todo el tiempo juntos, he vivido una experiencia y mientras duró el idilio fue complicada, pero tengo amigos en empresas familiares que hace muchos años que viven y trabajan juntos y son felices, han encontrado el equilibrio justo. Se puede pero es el camino más difícil.
    Mi receta personal, aunque parezca una utopia, es reconocer las diferencias de cada uno y no tratar de "encastrar" al otro en su ideal.

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  2. Gracias Eva!!, por lo que entiendo vas más por el lado del Yin y el Yang aunque conocés ejemplos de "convivencia intensa" que no andaban mal. Me parece buena tu reflexión final. Beso

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